El Faro de Cabo Mayor, uno de los faros más emblemáticos de España, ha asistido a lo largo de su historia a una evolución tecnológica que se ha visto reflejada en su sistema óptico. Así, desde su puesta en marcha en 1839, ha ido integrando los avances técnicos propios de cada época. Originalmente, este faro incorporó un conjunto de lentes Fresnel compuesto por 100 espejos superiores y 60 inferiores, utilizando aceite como combustible, mientras que en 1877 se convertiría en el primer faro de España en emplear aceite mineral. En su historia reciente, el faro ha contado con un conjunto catadióptrico que alojaba dos lámparas incandescentes.
Actualmente, con la irrupción de la tecnología LED y sus ventajas, y siguiendo con esta consigna de renovación tecnológica, el Faro de Cabo Mayor ha querido modernizar su sistema de funcionamiento lumínico preservando al mismo tiempo el valor histórico de su conjunto óptico. Por ello, ha apostado por la Lámpara LED MLL1000 desarrollada y patentada por Mediterráneo Señales Marítimas.
Nuestro equipo técnico se desplazó hasta tierras cántabras, para retirar las antiguas lámparas halógenas e instalar la lámpara LED MLL1000, la cual ofrecerá una mayor precisión óptica y rendimiento lumínico que el antiguo sistema óptico del faro.
Gracias a la MLL1000, el faro de Cabo Mayor ha logrado mantener su óptica clásica de vidrio de aprovechando todo el potencial que ofrece la tecnología LED: un mayor alcance con un consumo energético menor, y una vida útil superior a los 20 años.
Otra de las grandes ventajas de la MLL1000 es que con un solo diodo LED es capaz de generar una fuente de luz virtual en el punto focal exacto del sistema óptico clásico, logrando a su vez 360º de cobertura luminosa, y evitando además que se produzcan daños por el efecto lupa.
Así, la lámpara MLL1000 ya se encuentra funcionando a pleno rendimiento en el faro Cabo Mayor, donde hemos podido comprobar que el alcance de su haz de luz se ha optimizado conservando las lentes originales de este histórico faro.
